En homenaje a Oscar Wilde , era justo que desveláramos en esa misma sala nuestra interpretación de su esencia con el cautivador Wilde Eau de Parfum . Un aroma que captura la bergamota chispeante y la delicada flor de los cítricos, en capas con la combinación especiada de jazmín blanco, jengibre y clavel verde, una afirmación del amor y el afecto de Wilde.

Cuando los invitados entraron en la sala, sus ojos contemplaron un espectáculo de esplendor: paredes adornadas con oro brillante, techos decorados con arte renacentista pintado a mano y el aire lleno de tentadoras notas de bergamota y jengibre. Cada mesa presentaba un delicado arreglo de claveles verdes, un guiño a la flor favorita de Wilde. Con copas de champán en la mano, los invitados se mezclaron en medio del opulento entorno, compartiendo la admiración por Floris y su histórico legado.

Pronto nos esperaba un viaje culinario exclusivo, elaborado con maestría por el chef de repostería ejecutivo Loic Carbonnet. Se desarrolló una sinfonía de aromas y sabores mientras los invitados disfrutaban de una variedad de dulces, cada uno combinado ingeniosamente con la esencia de Wilde. Desde la delicada tarta de queso con bergamota hasta las tentadoras tartaletas de manzana especiada y jengibre, y los pasteles de limón con infusión de cítricos, cada bocado era un testimonio de la esencia de Wilde.

El momento culminante de la velada fueron los emotivos discursos de dos figuras distinguidas de Floris: Edward Bodenham, miembro de la novena generación de la familia Floris y director de perfumería, cuya familia recibía a Wilde a menudo en 89 Jermyn St. y Penny Ellis, la talentosa perfumista detrás de Wilde Eau de Parfum, y cuya admiración por Wilde brilla a través de esta fragancia chispeante.

Mientras dedicábamos una tarde a honrar el espíritu atemporal de Oscar Wilde , ahondando en el rico tapiz de la herencia de Floris y deleitándonos con el encanto de su impecable aroma, un sentimiento compartido fluyó por la sala. La sensación de que todos estábamos experimentando una pequeña parte de la historia. Con casi tres siglos de historia de Floris a nuestras espaldas, el camino que tenemos por delante rebosa de promesas, asegurando innumerables historias más por contar.